Ficha n°24
CARCAMO Y DARDON, Manuel Ignacio
Cargo: Cura de Santa Ana.
Nació: El 3 de mayo de 1771, en Santiago Guatemala.
Murió: En Santa Ana (?).
Padres: Manuel Ignacio CARCAMO y Manuela DARDON Y MARROQUIN.
Resumen: Según los documentos relativos a su ordenación, Manuel Ignacio Carcamo y Dardon nació el 3 de mayo de 1771 en la paroquia del Sagrario de Santiago Guatemala. Fue su padrino uno de los terratenientes más importantes del Reino : el regidor Ventura Nájera. Su padre llevaba el mismo nombre y era escribano público, casado con Manuela Dardón y Marroquín. Fue bautizado dos días después de su nacimiento por el cura rector más antiguo del Sagrario, Bernardo Muñoz y Barba. La nota que aparece en su expediente de ordenación es muy interesante, desde el punto de vista económico, porque Manuel Ignacio manifestaba entonces su deseo de ser promovido a subdiácono y diaconado a título de capellanías « \\para lo que como debo acompaño los instrumentos de los 5000 pesos que componen la quota de este arzobispado\\ ». El vice rector del colegio tridentino José Valdés atestaba que los ejercicios espirituales previos habían sido realizados.
En 1794, el enviado obtuvo grado de licenciado y doctor en teología, siendo todavía colegial del Tridentino. El padre Calixto Dávila, como tesorero de la Universidad, aseguraba que los 202 pesos requeridos para la distribución de propinas habían sido pagados. Con este diploma pasó a ocupar un lugar destacado en el espacio social capitalino. Sin embargo su capital símbolico, social y económico no era suficiente para pretender a una prebenda en la ciudad. Tras su ordenación por el arzobispo Cayetano Francos y Monroy, sirvió de catedrático de latinidad 3 años y fue rector del colegio de Ynfantes, nombrado por el cabildo en 1796. Cuando supo la promoción de Domingo Galisteo y Manrique en noviembre de 1797, concursó y obtuvó el servicio del curato de Santiago Apastepeque. Allí se quedó algunos años tejiendo vínculos con las familias más importantes del lugar. En 1804, sin que sepamos por qué necesitaba dinero, se obligó de mancomun con don Joseph Ortiz a favor del Hospital de San Juan de Dios. Joseph Días, vecino de esa ciudad, era su fiador.
En febrero de 1805 obtuvo el servicio de una paroquia más importante que Aspatepeque : la Santa Ana. Poco tiempo después decidió redactar su testamento. Citaba entre los suyos a sus hermanos : María del Carmen, Joaquín, Miguel, Petrona, Juana Antonia y, detalle curioso, no quería mencionar a Francisco «por ingrato a recibir sus buenos consejos» !
Durante los acontecimientos de 1811 en la provincia salvadoreña, su posición social bien asentada (y seguramente otros elementos que tendríamos que desarollar), lo indujo sin duda a afianzar localmente un grupo de poder cercano al ideario de los legitimistas. En enero de 1812 el Capitán Bustamente podía decir de él que era de los que habían acreditado « buen patriotismo en las sediciones ocurridas, su influjo y opinión han contribuido mucho a la tranquilidad en el mismo partido de Santa Anna ». Ignoramos su fecha de fallecimiento. Pero es muy posible que la información se conserva en el pueblo de Santa Ana.