Ficha n°28
NAVAS SAMPAYO Y GONZALEZ, Vicente
Cargo: Obispo de Comayagua.
Nació: fue bautizado el 12 de julio de 1741 en Mérida, Extremadura.
Murió: 1809 en Comayagua.
Resumen: El estudio de la vida de Vicente Navas Sampayo y González, nacido en Mérida –provincia de Extremadura- en julio de 1741, ofrece un ejemplo de la mobilidad geográfica que podía a veces implicar el servicio del rey durante el siglo XVIII. Sin embargo, nuestras fuentes son demasiado parciales para reconstituir la red social de este inviduo que tuvo una carrera fuera de lo común para la época.
Según el historiador fray Juan de la Fuente, Navas tomó el hábito de la Orden de Santo Domingo en el convento de Nuestra Señora de Atocha de Madrid. Su orden lo mandó en 1760 a Guatemala. Nueve años más tarde, ya era miembro del convento Grande de Santiago Guatemala, y rector del Colegio Doméstico. Actuaba entonces como procurador de la Orden, y afirmaba en una carta de queja al rey que desde que se había puesto en vigencia la secularización de las doctrinas, su provincia había entrado en decadencia, por falta de los emolumentos que producían dichas doctrinas . También se lamentaba de que hacían falta religiosos por la ausencia de estímulos económicos en las citadas doctrinas. Para resolver estas deficiencias, Navas estimaba que era necesario que su majestad accediera a la venida de 25 religiosos y que se suspendiera la secularización. En agosto de 1772 el rey le concedió la nominación de estos religiosos, lo que seguramente contribuyó a afianzar su posición de poder en Guatemala.
De hecho hizo el viaje a España para reclutar los religiosos, pero como lo explica en una carta al rey, sólo pudo reunir 17 en el puerto de Cádiz de los cuales solamente 13 se embarcaron. Estando todavía en Honduras, recibió la noticia de la ruina de su convento durante el terremoto de 1773. Existe después una laguna bastante importante en la información, porque lo localizamos nuevamente en la ciudad de Guatemala en 1792 jugando siempre el papel de procurador de su orden. En una carta autobiográfica menciona que fue secretario general de España y Portugal –sin darnos mas detalles- durante siete años y después, estando en Roma, se enfermó y se quedo allí para restablecerse.
En noviembre de 1794 fue nombrado obispo de Comayagua, en momentos en que se encontraba en la ciudad de la Habana. Lo estraño es que su nombre no figura en la terna. Fue nombrado por la mediación exclusiva del Duque de la Alcudia, quien subrayó sus calidades y el mérito de sus obras. Escribió sobre las maneras de gobernar las provincias americanas. A pesar de un real decreto que le otorgó 4000 pesos para ayuda de costa en 1799, la Audiencia de Guatemala se quejaba de su presencia…en la Habana. Lo increíble es que el obispo justificaba esta demora ! Sus explicaciones eran bastante confusas : se quejaba de haber perdido correspondencia importante para Guatemala entre 1795 y 1796. Esas cartas eran para Juan Bautista Marticorena, un comerciante de Guatemala. En julio de 1796 había contratado un seguro en Cádiz que quería mandar a Honduras. Pero no pudo pagar el precio de 880 pesos y le pidió a Manuel José Pavón en Guatemala que cancelara esta suma. Sin embargo Juan Bautista Marticorena no podía pagar el dinero porque le faltaban unos documentos, ¡esto el 20 de julio de 1799 !
Por fin llegó al puerto de Trujillo en agosto de 1802, ¡ocho años después del fallecimiento del antiguo obispo de Honduras ! Una vez instalado se puso a gobernar y entró en conflicto abierto contra el arcediano José Juaquín Beltrán. Un año más tarde denunciaba a todos los miembros de su cabildo : el chantre no estaba de pie una semana entera, el arcediano "pasa la mayor parte del tiempo cayendo y levantando", y ¡el tesorero era "un sujeto tan desidioso y condesciente que ha perdido el seminario en el poco tiempo que fue rector"! A pesar de encontrarse en una diócesis bastante aislada y muy pobre, Vicente Navas no permaneció aislado de los vientos de cambio que soplaban en la ciudad de Guatemala a principios del siglo XIX. Participó a su manera en la difusión de las Luces. Por ejemplo, hizo circular una carta pastoral para promover ciertos cultivos en su diócesis, conforme al Informe de la Sociedad de Madrid sobre la ley agraria, que había publicado la Gazeta de Guatemala. En aquel documento prometía regalar a sus expensas las semillas. Más significativo aun el informe que mandó a la Audiencia para decir que estaba de acuerdo en ofrecer una tercera parte de los diezmos para la promoción de la agricultura. Según Navas, era posible dar 35 pesos a todos los ciudadanos que produjeran 500 plantas de cacao o de café. Con esta demostración buscaba convencer a los funcionarios reales de que era posible tener una política más agresiva para invertir en la agricultura. Las ideas innovadoras tenían un costo que los miembros del cabildo tenían que pagar y de hecho el prelado se quejaba en términos muy amargos de ellos : "siempre tenazmente han adherido a sus intereses particulares, nunca los pierden de vista...en lo que se muestran mas incorregibles es en proceder en todos sus actos comunes con tanta independencia del prelado como si estubiesen en sede vacante."
A finales del año de 1805, se encontraba en Guatemala para recobrar su salud. Se quejaba de tener que vivir de la caridad del contador de diezmos Juan Rubio y Gemmir. Denunciaba a Joaquín Lindo quien había dejado solamente 600 pesos de los 7062 pesos que le correspondían de los diezmos. El obispo, por las limitaciones de dinero y de salud quizás que tenía ¡no podía ir a tomar el agua mineral de Escuintla ! Finalmente el presidente tuvo que intervenir para obligar Joaquín lindo a pagar 2000 pesos al prelado ; Lindo estaba entonces en Antigua en una feria de ganado. Vicente Navas regresó finalmente a Comayagua en donde murió en 1809. Fue sepultado en la catedral.