Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1La obra Guatemala: El martirio de una reina y la guerra de la vergüenza escrita por Marta Guadalupe González Molina reúne dos hilos narrativos: por un lado, describe la vida y muerte de Rogelia Cruz Martínez, reina de belleza y Miss Guatemala en 1959. Por otro lado, da un resumen histórico de los acontecimientos políticos del país, los factores sociales y políticos que llevaron al asesinato de la reina de belleza en 1968, y los acontecimientos de las décadas siguientes hasta la fecha de la publicación, en 2011.

2La costumbre de escoger “reinas” fue introducida por el General Jorge Ubico Castañeda, iniciando con la selección de la reina de independencia. Conforme pasaron los años, más y más instituciones empezaron a elegir reinas para diferentes ocasiones, incluyendo asociaciones empresariales y universidades. En 1955, Guatemala se unió a la elección de Miss Universo, y para este evento Rogelia Cruz Martínez, en aquel tiempo estudiante de arquitectura en la Universidad San Carlos de Guatemala (USAC), fue electa Señorita Guatemala en 1959.

3Aprendemos que Rogelia Cruz Martínez nació en 1941 en la capital de Guatemala como hija de Miguel Ángel Cruz Franco y de Blanca Martínez Flores. Su madre provenía de una familia de clase media de Chiquimula, su padre pertenecía a una familia acomodada de la capital y trabajaba de maestro constructor de obras. Rogelia estudiaba en el Instituto Normal para Señoritas Belén, una institución conocida por su involucramiento en protestas y movimientos estudiantiles por varias décadas. También se dedicaba a clases de ballet.

4En 1955, poco tiempo después de la caída del gobierno democrático de Jacobo Árbenz, murieron ambos padres de Rogelia Cruz Martínez por espacio de pocos meses, y ella y sus dos pequeñas hermanas gemelas se quedaron como internadas en el Instituto Belén.

5En julio de 1958, Rogelia Cruz Martínez fue elegida como Miss Guatemala. Según la autora, “medía 1,68 metros de altura, de buena figura y buen carácter. Tenía el pelo largo y castaño. La nariz respingada la heredó de su padre, los ojos verdes de su madre y de ambos su inteligencia. (...) Su belleza era natural” (pág. 68). En 1959, participó en el concurso de Miss Universo en Long Beach, California, y este mismo año se graduó de maestra.

6Dos años más tarde conoció a Carlos Rubén Batres Luna, miembro de la poderosa red familiar de los Batres, con el cual iba a tener una relación sentimental durante cinco años. Estudiaba y a la vez trabajaba en un banco para apoyar a sus hermanas. Pocos años después cambió su trabajo por un puesto en un canal de televisión. Pero estos fueron también los años de una creciente organización universitaria, con la fundación del Frente Unido del Estudiante Guatemalteco Organizado FUEGO, que culminó con las protestas masivas y manifestaciones del sector educativo apoyado por una amplia alianza de sectores populares en 1962. Y mientras Rogelia Cruz Martínez llevaba una vida ejemplar frente a su familia, a través de sus contactos universitarios, en secreto se incorporaba en el Frente Guerillero Edgar Ibarra y llevaba a cabo trabajo administrativo en la capital. En 1965, el ejército cateó la finca donde vivía Rogelia Cruz Martínez con sus hermanas y encontró armas y otros útiles para la lucha armada. Ella fue encarcelada, y al salir de la cárcel pocos meses después tuvo que buscar nueva casa y un nuevo trabajo. Al año siguente, la antigua reina se incorporó a la Juventud Patriótica del Trabajo (JPT), organización de juventud del Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT), y su militancia finalmente provocó el fin de su relación con Carlos Ruben Batres Luna. En 1966, el grupo guerillero Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR) intentó secuestrar a uno de sus tíos, y en esta operación desventurada mató a éste y a su hijo. Sin embargo, ella siguió con su colaboración con la guerilla. A pesar de su delicada situación de seguridad, ni el PGT ni las FAR le ofrecieron protección. En enero de 1968 fue torturada y matada por paramilitares en su vivienda.

7Después de la descripción de la vida de Rogelia Cruz Martínez, la autora sigue describiendo en casi 300 páginas más lo que para ella es “la guerra de la vergüenza”. Critica la represión por parte del gobierno, las élites nacionales que piensan en su propio bien pero no en el del pueblo entero, y la guerrilla por sus conflictos internos, el alto nivel de consumo de alcohol, la afinidad de los comandantes a las prostitutas, y por su falta de seriedad en la lucha armada. Las estructuras sociales siguen iguales hasta después de la firma de la paz en 1996, y la autora prosigue con las descripciones de acontecimientos políticos y anécdotas hasta el año de publicación de la presente obra.

8El libro Guatemala: El martirio de una reina y la guerra de la vergüenza no es un libro académico, ni pretende serlo. No encontramos una descripción de la metodología empleada por la autora para reconstruir la vida de Rogelia Cruz Martínez, así que no entendemos cómo llega a saber cuáles eran los juegos favoritos de ella o sus obras de teatro preferidas. En repetidas ocasiones el lector y la lectora encuentran juicios eminentemente morales acerca del (buen) carácter y de las intenciones (siempre nobles) de una joven maravillosa, sin ningún error humano y sin ninguna debilidad.

9La autora reúne en su libro muchos detalles y anécdotas de casi un siglo de historia de Guatemala, incluyendo asesinatos políticos, engaños, invasiones e intervenciones en los asuntos interiores del país. Critica apasionadamente al gobierno y las élites nacionales, pero también deja muy claro que muchos personajes dentro de la guerrilla no permitieron esperar algo mejor por parte de ella.

10Sorprenden los estereotipos usados (por ejemplo “en las décadas de 1940 y 1950 aún la vida en Guatemala era simple, sana y segura”, pág. 29), y la ausencia de una reflexión profundizada sobre el racismo contra la población Maya mayoritaria. La autora reclama que no se haga diferencia entre ladinos e indígenas pero ella misma aplica los valores y el estándar ladinos. Esto se refleja entre otras cosas en la muy admirada “belleza natural” de la reina: era alta, blanca, con pelo castaño y ojos verdes.

11En resumen, Guatemala: El martirio de una reina y la guerra de la vergüenza ofrece un homenaje a la joven Miss Guatemala Rogelia Cruz Martínez, y un resumen emocional de acontecimientos políticos y sociales en Guatemala desde los años 1930 hasta el 2010.

12Eva Kalny
Leibniz Universidad Hanover