Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica

1José Dionisio Herrera Díaz del Valle fue hijo de José Jacinto Herrera y de Paula Díaz del Valle, dueños de las haciendas San Francisco de Yeguare y Tapatoca. Su padre fue desde 1793 alcalde provincial de la Villa de Choluteca. Por su madre estaba emparentado con el abogado José Cecilio del Valle . Entre sus hermanos, destaca Próspero quien fue ministro plenipotenciario en Europa, 1825-26, Justo José que alcanzo el puesto de jefe de estado de Honduras, 1836-37 y enviado extraordinario en El Salvador, 1839. Se casó con Micaela Quezada en 1820. Tuvo varios hijos: Julián, María Manuela, José Dionisio, Mariano Esteban, Miguel, José María Dolores, José Antonio.

2A los 13 años viajó a Guatemala a estudiar en la Universidad de San Carlos de Borromeo en Guatemala, obteniendo el grado de bachiller en leyes. Hacia 1815 retornó a Honduras y se instaló en Macuelizo, Santa Bárbara, en sus haciendas. Cuatro años después regresaría a Tegucigalpa y sería nombrado secretario del ayuntamiento de Tegucigalpa. En 1820 es propuesto por el alcalde mayor Narciso Mallol como candidato a diputado suplente para Cortes. Mallol lo había propuesto para quitárselo de encima, pues consideraba que Herrera fomentaba acciones contra la autoridad. Redactó el Acta de Independencia de Honduras (el 28 de septiembre de 1821). Tras la Independencia Tegucigalpa retomó la disputa con la cabecera provincial Comayagua y en 1823 Herrera propuso separar a Tegucigalpa de la jurisdicción comayagüense. Los conflictos con Comayagua hicieron que el gobierno guatemalteco apoyara a Tegucigalpa y enviara al coronel Simón Gutiérrez a controlar Honduras. Este nombró a Herrera jefe político de Tegucigalpa, con mandato independiente de Comayagua. Al arribar a Honduras el general mexicano Vicente Fílisola, nombraría como jefe político de Honduras a Juan Lindo, rival de Herrera. En 1824 el Congreso Constituyente hondureño nombraría a Herrera jefe de estado y como vicejefe a José Justo Milla y Pineda. Herrera nombró secretario general a Francisco Morazán, dividió el territorio hondureño en siete departamentos, creo la Corte Suprema de Justicia y promulgó la primera Constitución política estatal en 1825. En ese contexto surgiría un conflicto político en Nicaragua cuando la ciudad de León se enfrentaba a la de Granada. El congreso hondureño envió tropas a Nicaragua, mientras en Comayagua lograría trasladar la sede del congreso a esa ciudad.

3 Mientras tanto, en Tegucigalpa, el subdelegado de hacienda, destituido por Herrera, Guadalupe Lagos formaba un partido de pardos (mulatos) contra blancos y enemistaba al presidente federal, Manuel José Arce con Herrera. Este último se trasladaría a Comayagua pero al mismo tiempo renunciaría el vicejefe Milla. Los opositores de Herrera plantearon nuevas elecciones y Herrera renunció. Por su parte, el gobernador del Obispado de Comayagua, el canónigo José Nicolás Irías , incitaría un levantamiento con repercusiones en Santa Bárbara, Gracias y Olancho. También sería atacada la casa de Herrera. En 1826 este último criticaría al presidente Arce por su acción contra las autoridades del Estado de Guatemala. Mientras Arce convocaba a un congreso extraordinario, Herrera apoyaba un congreso ordinario, propuesto por el vicejefe salvadoreño, Mariano Prado . En ese contexto, Arce armó al ex-vicejefe Milla, quien invadió Honduras, controlando el tabaco de Los Llanos, importante fuente de ingreso fiscal. En 1827 los federalistas hondureños y nicaragüenses atacaron a las tropas de Milla, pero fueron derrotados en la batalla de La Trinidad. Milla sitió e incendió Comayagua y Herrera fue apresado y conducido a Guatemala. Pronto fue dejado en libertad. Milla convocó a elecciones que fueron ganadas por Gerónimo Zelaya. En el ínterin el vicepresidente guatemalteco, Mariano Beltranena, solicitaría a Herrera que mediara con los salvadoreños y hondureños, rebelados contra Arce y Guatemala. Pero para ese entonces, Francisco Morazán había derrotado a los guatemaltecos. En 1829 Morazán nombraría a Herrera conciliador mediador y jefe provisional de Nicaragua, debido al conflicto entre Manuel Antonio de la Cerda (proArce y Jefe de Estado) y Juan Argüello (liberal y Vicejefe de Estado). Herrera logró que los contendientes depusieran las armas, pero al no poder reformar la constitución nicaragüense renunció en 1832. La ciudad de León no aceptó su renuncia y tropas de Managua la atacaron en 1833. Poco después Herrera logró controlar el país. Al finalizar su mandato se dirigió hacia El Salvador, donde también había conflictos internos. Morazán lograría contenerlos y la Asamblea Legislativa salvadoreña elegiría como jefe de estado a Herrera, quien no aceptó. En Honduras sería nombrado presidente su hermano Justo José Herrera, mientras Dionisio, fue elegido diputado por Nacaome. En la asamblea impulsó medidas para que los llamados “bienes muertos” de la iglesia se destinaran a crear escuelas, apoyó la Ley Tributaria, el Código Civil, y elaboró el Reglamento para Escuelas de Primeras Letras. Además creó el periódico oficial ( Semanario oficial ).

4 En 1838 al darse libertad a los Estados para constituirse en independientes se reformaría la Constitución de 1825. Por enfermedad de su hermano se convocaría a elecciones, resultando electos jefe de estado, Juan Lindo, y Herrera, vicejefe. En ese contexto tropas hondureñas atacaron a El Salvador pero fueron derrotadas por Morazán y Herrera renunció. Francisco Ferrera, aliado de Lindo, intentó capturarlo pero escapó hacia el Salvador y se radicó en San Vicente. Ferrera saqueó su casa y confiscó sus propiedades. En 1844, Herrera se rebelaría contra Ferrera pero derrotado huyó a Nicaragua. Poco después se radicaría en San Miguel, El Salvador, donde se convertirá en maestro de escuela. En 1849 se traslada a vivir a San Salvador y muere al año siguiente.